Espero que hayáis pasado un buen y descansado verano o lo sigas disfrutando si estás en ello. Por mi parte, te traigo un post por si te estás planteando cómo conseguir nuevos objetivos o propósitos con la vuelta a tu rutina habitual.
Septiembre me recuerda a cuando era una adolescente y me invadía la ilusión y disfrutaba de oler a libros nuevos ¡qué placer! ¿te pasaba igual?
A muchos, con la vuelta a la rutina nos puede invadir la tristeza, y a muchos otros como a servidora, nos puede ser un reto para cumplir todos aquellos propósitos de septiembre que nos hemos propuesto o quizás aún no, ¡todavía estás a tiempo!
1. ¿No tienes idea qué propósito elegir? ¡Lee con atención!
Es de suma importancia el plantearnos preguntas estratégicas que, nos ayuden y nos sirvan de guía para encontrar tu propósito de vida. Te sugiero y animo a que respondas a estas 3 preguntas:
·
¿ ¿Qué valores y cualidades admiras de otras personas?
· ¿Qué actividades te hacen sentir pletórico/a y lleno/a de energía? Si tuvieras una varita mágica
· ¿Qué pedirías cambiar o mejorar en tu vida y/o en el mundo? Respóndelas en tu diario personal y, te cuestiónate otras preguntas de igual importancia para poder llegar a encontrar tu propósito.
2. Escribe un propósito/objetivo alcanzable y ponte un plazo.
Es muy importante que lo anotes en un papel/libreta y lo consultes a menudo o lo pongas a la vista, ¿por qué? porque podemos andar en mil cosas a la vez y nuestra mente suele atender a lo que creemos “urgente” o “inmediato”
¿Acaso tu propósito para septiembre no es algo en mayor o menor medida inmediato para ti o lo anhelas con muchas ganas y quieres que se cumpla cuanto antes? No obstante, no hay prisas, pero tampoco nos crucemos de brazos; para ello es ¡muy importante! Poner una fecha límite –siempre dentro de una flexibilidad- a nuestro objetivo. ¡Comprométete con él y a por ello!
3. ¿Ya tienes claro tu objetivo y lo has anotado? ¡Toma acción! Y ¡Sal de tu zona de confort!
Todas las personas, tendemos a buscar aquellas situaciones y actividades que nos hacen sentir cómodos y fuera de peligro, pero ¡ojo! esas no son las situaciones y/o actividades que nos harán felices, pero sí son las que cumplen a rajatabla el famoso dicho: “más vale malo conocido que bueno por conocer” te suena, ¿verdad? Este ejercicio se trata de todo lo contrario; se trata de atrevernos a conocer personas nuevas y diversas; igualmente aquellas actividades que siempre hemos pensado hacer, pero siempre nos ponemos excusas para no hacerlas. Si no vemos más alternativas que las ya conocidas en nuestro día a día, no podremos averiguar el gran abanico de posibilidades que existen, y mucho menos aún, podrás encontrar tu propósito. ¿Vamos a ello?
4. Mantén la ilusión cada día y confía en la vida.
Conforme nos vamos haciendo mayores y tras las piedras que nos vamos encontrando en nuestro camino, nos va minando parte de nuestra alegría innata y natural como cuando éramos niños, pero no es menos cierto que, dicha alegría y entusiasmo podemos rescatarlo si así lo queremos. Piensa en la última vez que te reíste a carcajada limpia, sin acordarte de nada más que estar en ese momento presente riéndote. Seguramente, te darás cuenta que, las mayores risas y carcajadas más auténticas nos las suele producir las situaciones y momentos más inverosímiles y casuales. ¿Por qué es tan importante estar alegre? Además, claro está que, nos sentimos mejor al estar alegres y positivos, al estar alegres vemos todo desde una mejor y más amplia perspectiva, por lo que, podrás conseguir con mayor facilidad tu propósito u objetivo.
5. Comunica tu propósito.
Este último punto es ya muy personal, pero cuando digo comunicar nuestro propósito, me refiero aquellos objetivos que nos cuesta comprometernos con ellos o mejor dicho aun, llevarlos a cabo como nuestra rutina habitual.
En mi caso, no soy muy dada a comunicar mis objetivos o propósitos hasta que no se cumplen, pero hay algunos que prefiero comunicarlos –aquellos que más se me resisten- con antelación porque al hacer partícipes a los demás, es como que me adquiero un compromiso y una obligación y, es la única manera de no fallarme ni a mí ni a los demás.
Un ejemplo de ello, es la introducción del ejercicio físico en mi vida –de forma habitual, no esporádica- Así que como muchos sabéis uno mis propósitos que retomo de nuevo en septiembre son ¡hacer ejercicio!
¿CUÁLES SON TUS NUEVOS OBJETIVOS O PROPÓSITOS?
¡Un abrazo gigante!
Buenos consejos, en mi caso este año a los planes les he dado libertad y avanzo paso a paso. Un abrazote
ResponderEliminarHola, Ester! Es lo ideal, ir paso a paso y no ponerse objetivos nada realistas y que no podamos cumplir.
Eliminar¡Otro abrazote para ti!
Hola Yolanda, geniales recomendaciones. Yo reconozco que no soy de marcarme objetivos porque me agobio, si me digo tengo que cumplir eso, al final lo convierto en obligación, deja de ser gratificante y, además, me agobia. Así que intento no marcarme metas, sé lo que quiero hacer, cuáles son mis propósitos y sueños, y voy a mi ritmo.
ResponderEliminar¡Buena semana!
Un abrazo. :)
Hola, Merche! Es cierto que muchas veces nos agobiamos al marcarnos objetivos, sobre todo si nos exigimos demasiado, y como bien dices, cuando se convierte en obligación en vez de disfrute. Totalmente de acuerdo en ir siempre a nuestro ritmo.
EliminarIgualmente, feliz semana.
Gracias por comentar y otro abrazo de vuelta para ti!
Hola Yolanda, unos consejos que hay que tener en cuenta. Aunque reconozco que no suelo agobiarme porque me marcó unos objetivos dentro de mi realidad y capacidad. Gracias por los consejos. Un abrazo
ResponderEliminarHola, Nuria! Nunca tenemos que agobiarnos en cumplir los objetivos a rajatabla. Y lo has explicado a la perfección en marcar objetivos dentro de nuestra realidad y capacidad.
EliminarGracias a ti y otro abrazo de vuelta!
Tus recomendaciones son muy buenas pero yo me suelo marcar los objetivos a corto plazo Yolanda. Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es lo esencial, objetivos a corto plazo, aunque tanto estos objetivos como los de medio y largo plazo tienen cabida y se puede aplicar a ambos.
EliminarGracias a ti por comentar y otro abrazo de vuelta, Conchi!
Muy buenos objetivos. Importante marcar unas metas apropiadas en cada momento.
ResponderEliminarAbrazo
Así es, Amaia. Unas metas apropiadas para cada persona y momento como bien dices.
EliminarOtro abrazo para ti!
Hola, Yolanda, muy buen artículo con metas a conseguir en la vida. Yo tengo varios: Salir a andar en contacto con la naturaleza, cuidar mis relaciones sociales, apagar todos los dispositivos electrónicos dos horas antes de acostarme, hacer ejercicio... No pongo lo de leer porque ese ya me viene dado y lo mismo lo de escribir.
ResponderEliminarUn abrazo!
Hola, María Pilar! A por todos esos buenos objetivos que te has propuesto; ya veras como los consigues! Me pasa igual, leer y escribir ya no los planteo porque ya forman parte de mis hábitos.
EliminarOtro abrazo de vuelta!
¡Hola Yolanda! Septiembre es mi mes, es el que me suele devolver la alegría y las ganas de crear. Mis propósitos, mantener el descanso de agosto y escribir todo lo que pueda, por ahora voy bien. Me ha encantado tu entrada cariño. Besos :D
ResponderEliminar¡Hola, Margarita! Me sucede igual, ¡me alegra septiembre! Muy buenos propósitos y gracias por compartirlos con tanto cariño. ¡A por ellos!
EliminarMe alegro que te haya gustado la entrada, ¡muchas gracias!
Besos para ti también!